Las personas con un trastorno del espectro del autismo (TEA) del centro ocupacional AZLAN de APNABI Lan han iniciado las vacaciones de verano con una salida grupal al monte Artxanda. Así, y tras un mes de descanso, en septiembre volverán a las tareas habituales.
Cabe destacar que esta excursión es el broche final a dos semanas destinadas a propuestas alejadas de la dinámica laboral habitual. Mediante la práctica deportiva y juegos cooperativos, las personas participantes han trabajado aspectos enfocados a su desarrollo personal y la inclusión social, objetivo que persigue la toda la actividad del centro ocupacional.
De esa manera han dado por finalizado un curso marcado por la pandemia de la COVID-19 y las restricciones de prevención, que han obligado a amoldar algunas de las otras actividades que ofrece el centro, como el taller de vida saludable, el club de lectura o las dinámicas del grupo de teatro.
Desarrollo personal
AZLAN nació hace más de 10 años para dar respuestas específica a las personas adultas con TEA de Bizkaia que encontraban dificultades para continuar su desarrollo sociolaboral en entornos ordinarios y que, por sus competencias personales, requerían de un entorno destinado a tal fin y estructurado donde poder seguir desarrollándose, mejorando su inclusión y su calidad de vida.
Actualmente este centro presta diferentes servicios a empresas y público en general de forma profesional en las que las personas participantes en el centro ponen en práctica sus habilidades laborales: manipulados de ensobrados, encuadernaciones, encargos y entregas, la tienda de APNABI Lan, etc.
Y es que, además, son cada vez son más las empresas que confían en el equipo del centro ocupacional de APNABI Lan para la realización de diversos trabajos y contribuir así a la inclusión laboral de las personas adultas con un trastorno del espectro del autismo (TEA).
Inclusión laboral
Actualmente compañías como Mape Seguridad, Mecánica Comercial Meco o Valle Escudero derivan al centro de APNABI Lan tareas de manipulado, y compañías como Asimob o Grabit cuentan con el equipo para el entrenamiento de Inteligencia Artificial de cara a completar sus aplicaciones digitales.
Gracias a ello, y a pesar de los vaivenes de la pandemia, las personas del centro ocupacional han podido seguir avanzando en sus objetivos sociolaborales y se ha facilitado el empleo ordinario a 4 de estas personas.